sábado, 30 de mayo de 2015

Términos lingüísticos 3

Quiero escribir un poema de amor sin el sustantivo pasado, 
sin la locución verbal echar de menos, sin el adjetivo triste.
Un poema de amor en el que no aparezca la locución adverbial nunca jamás ni el verbo marchar.
Quiero escribir, en definitiva, un poema sin significado y sin sentido en el que yo rime contigo y tú rime conmigo. 

jueves, 21 de mayo de 2015

Sombra

Hoy he conocido a alguien:
dice que es una prolongación de mí misma
y responde al nombre de sombra.
Aparece con el sol de cada mañana
y va casi siempre por delante de mi,
bailando libre e independiente.
No almacena recuerdos de nada ni nadie,
(no, ni tan siquiera de ti).
Me gusta.
Así que he decidido seguirla
y dejarme llevar por ella.
A ver dónde me lleva su reflejo,
a ver hacia dónde caminan mis pies...

domingo, 17 de mayo de 2015

El amor es lo que tiene...

Os miráis fijamente, de esa forma feliz y eterna en la que solo se miran los que viven en ese estado. Apenas es un segundo pero notas que el mundo se para; y mientras este mundo se para, tu cabeza fabrica otro mundo con ventanas al futuro, un futuro al que lo único que le pides es que esté habitado por aquella persona a la que estás mirando (y admirando y queriendo).

El amor es lo que tiene…

Empiezas a conducir por una carretera que no sabes si es secundaria ni hacia dónde va. Pisas el acelerador al ritmo frenético que te dictan los latidos del corazón aunque una parte de ti te diga que frenes, que no conoces a ciencia cierta el destino, que quizás te estrelles. Sin embargo, sigues y haces bien: sabes el lugar en el que hallar los airbags que te salvarán del golpe y conoces las dosis de alcohol que necesitas para curar las heridas. Pero hoy este circuito de velocidad es tuyo y piensas aprovecharlo. Tienes que aprovecharlo como si fuese una oportunidad única, la última ocasión.

El amor es lo que tiene…

Has llegado al precipicio. Y tú que llevas toda la vida escalando sientes de pronto vértigo. “No, no es vértigo”, te dices. Es miedo. Te has quedado paralizada y has empezado a ponerte tiritas aunque no te has hecho ni un rasguño. Esa maldita manía de que asuste tanto la felicidad, de que nos aterrorice justo aquello que solo nos da instantes infinitos…

El amor es lo que tiene…

Pero no vayas a perdértelo.

viernes, 15 de mayo de 2015

Era así de simple...

Era así de simple:
solo había que cambiar de almohada
para que mis noches dejaran de soñarte.

Tardamos en darnos cuenta...

Tardamos en darnos cuenta que las heridas solo se curarían
cuando dejásemos de ponerles parches.

miércoles, 6 de mayo de 2015

Lo que quiero que seas...

La manta que te cobija en el mes de enero.
El 3x4 que hace latir cada febrero.
La primavera naciente de finales de marzo.
La alegría de los treinta días que tiene abril.
La ilusión de adelantar el verano y bañarse en el mar en mayo.
La emoción de las tardes infinitas que empiezan a compartirse en junio.
El sabor de la hierbabuena en los mojitos de julio.
El tacto de la sal marina en la piel que dejan los días de agosto.
La sana nostalgia de los últimos atardeceres de septiembre.
La sensación de volver a empezar que ofrece cada octubre.
La belleza fría que viene con cada noviembre.
La unicidad de los reencuentros de diciembre.
Todo esto es lo que quiero que seas.
Todo esto...todos los días.

domingo, 3 de mayo de 2015

Simplemente tú

Cuando me preguntan en una persona que sea un ejemplo a seguir pienso en ti.
Tú, que pareces incansable y siempre encuentras un motivo por el que continuar luchando.
Tú, que serías capaz de alcanzar la luna sin despeinarte.
Tú, que eres quien mejor salva de cualquier desastre.
Tú, que soportas mi lado más insoportable.
Tú, que ofreces siempre los abrazos más reconfortantes.
Tú, con quien me gusta compartir sonrisas, risas y carcajadas cómplices.
Tú, que me haces sentir que toda meta alcanzada es una gran victoria.
Tú, que me has regalado una vida que no tiene precio pero tiene todo el valor y el sentido del mundo.
Tú, siempre tú, en todo tú...y todo por mi.
Tú, simplemente tú: la persona a la que no me gustaría tener que echar de menos nunca.